Siempre supe que vas, a 10 mil piés sobre mi.

viernes, 25 de noviembre de 2011

Se trata de seguir.

Jamás he pensado en dormir cien años, y aunque nunca he creído apropiado entregar mi voz a nadie, he regalado todas y cada una de mis palabras. A veces me he visto capaz de luchar por alguien, pero no de enamorarme de un inmaduro Peter Pan que no quiere crecer. Pero yo sí he creído tener envenenado cada poro de mi cuerpo, y he esperado un beso cada noche antes de irme acostar. Confieso que nunca me he sabido las coordenadas que tiene un corazón para buscarlo, y no perderme mientras le pierdo yo a él. Tampoco he aspirado a convertirme en algo más que la antiheroina de mi propia historia. No nací para perder cosas, y aún así, parece que me paso la vida buscándolas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario